Las moscas de la fruta pueden colarse en su cocina en muy poco tiempo. Son más frecuentes encima de la cesta de la fruta y alrededor del fregadero y la encimera.
Cuando dejas tu comida al aire libre, ponen sus huevos y la contaminan. Sin embargo, debe saber que es totalmente posible deshacerse de ellas para siempre. He aquí un consejo estupendo que combina dos ingredientes sencillos al alcance de todos.
Aunque las moscas de la fruta son inofensivas, su invasión puede resultar muy embarazosa con el tiempo. No obstante, no olvides que pueden ser portadoras de gérmenes. Así que deshazte de ellas inmediatamente para evitar que se propaguen.
He aquí un ingenioso truco basado en dos simples ingredientes para deshacerse de las moscas de la fruta
La invasión de moscas de la fruta en el hogar puede ser molesta e invasiva. Por suerte, ¡hay una solución para todo! Para eliminarlas definitivamente de tu cocina, el primer paso esencial es eliminar todos los productos que puedan atraerlas. Esto se aplica especialmente a la fruta y la verdura, así como a la basura del cubo. Por lo tanto, es necesario limpiar a fondo todas las superficies y el cubo con frecuencia.
Vinagre de sidra y detergente líquido: la combinación ganadora para eliminar las moscas de la fruta
¿Cómo hacer frente a la invasión de moscas de la fruta ? Aquí tienes un truco supereficaz que seguro que te encantará para deshacerte de ellas para siempre.
Coge un bol o plato pequeño y mezcla en él un poco de vinagre de sidra de manzana con un poco de detergente líquido. Después, colócalo en un rincón estratégico de tu cocina.
Esta mezcla se convierte en una especie de cebo para estos insectos voladores. El principio es sencillo: las moscas se sienten atraídas por el olor del vinagre e inmediatamente se dirigen al recipiente. Allí, quedan atrapadas por la superficie pegajosa y ya no pueden escapar.
Otra trampa súper eficaz para la mosca de la fruta
Las moscas de la fruta aprecian mucho la comida madura. Para ello, elija un cebo eficaz como fruta madura, cerveza u otro líquido fermentado para ponerlo en un tarro de cristal con un embudo de papel encima.
Esto deja una pequeña abertura hacia el tarro para que entren las moscas. De esta forma, las moscas se sentirán atraídas por el olor del cebo e inmediatamente caerán en la trampa.