Una piel suave y cuidada es el sueño de cualquiera, pero el cansancio y los signos de la edad no dan tregua a nadie. Aquí te explicamos cómo cuidar tu rostro con un aceite natural que puedes preparar fácilmente en casa.
La vida es una sucesión constante de cosas que hacer, responsabilidades y compromisos que cumplir, por lo que el tiempo libre de que disponemos, como sabemos, es siempre muy poco. A menudo, por tanto, nos encontramos haciendo anuncios, y en esos casos, por absurdo que parezca, tendemos a dejar en un segundo plano todo lo relacionado con nosotros mismos.
Una tarde de relax y unas compras saludables, por ejemplo, son algunas de las cosas que pensamos que no son esenciales. En realidad, contribuyen sustancialmente al bienestar de nuestro corazón y nuestra mente. Otra actividad muy importante es el cuidado personal, caracterizado por todas esas pequeñas atenciones hacia nosotros mismos que, al fin y al cabo, no requieren que les dediquemos grandes cantidades de tiempo.
Una de las cosas a las que todos prestamos especial atención -las mujeres sobre todo- es sin duda la piel del rostro. Como todos sabéis, es especialmente susceptible a la aparición de arrugas finas, así como a los signos debidos a los cambios climáticos estacionales y al cansancio excesivo. Las cremas y los sueros que se encuentran en el mercado suelen ser muy caros, pero no todo el mundo sabe que es posible poner remedio a este problema. ¿Cómo? Averigüémoslo juntos.
El aceite natural perfecto para alisar la piel
El rostro es una de las partes más delicadas de nuestro cuerpo, por eso es bueno cuidarlo constantemente y, a ser posible, con productos naturales. Para conseguir una piel tersa y pulida y, al mismo tiempo, no gastar una cantidad excesiva de dinero, podemos apelar a una sencilla receta de bricolaje con sólo dos ingredientes: aceite de oliva virgen extra y hojas de salvia.
Para hacer esta fácil receta, lo primero que necesitamos es un robot de cocina, y colocar en su interior dos cucharadas de hojas de salvia. Ahora solo queda hacer funcionar el aparato hasta que la especia quede reducida a polvo.
A continuación, pasar la salvia picada a un tarro de cristal, verter 100 ml de aceite de oliva virgen extra por encima y mezclar bien.
Una vez preparada la mezcla, es necesario utilizar una olla en la que, en primer lugar, hay que colocar un paño limpio o una toalla pequeña. A continuación, colocamos el tarro (sin tapa) en la olla y lo llenamos de agua caliente hasta que llegue a la mitad del recipiente.
Aceite de salvia listo en sólo veinte minutos
Llegados a este punto, la receta está casi terminada. El último paso es poner la olla en la cocina, encender el fuego y dejar que se caliente durante unos veinte minutos. Transcurrido este tiempo, sólo nos queda dejar enfriar nuestro aceite, y una vez listo, con la ayuda de un colador y dos capas de gasa, podemos colar filtrar y guardarlo en tarros en la nevera.
Para obtener la piel que siempre hemos soñado, basta con aplicar el aceite natural de salvia sólo una vez al día y dejarlo actuar unos minutos.