¡Cuidar de su jardín sin productos fitosanitarios químicos es posible! Cuando aparece una enfermedad fúngica o una plaga de insectos en el jardín o el huerto, sabemos que los daños y las pérdidas pueden ser graves rápidamente. Esto es especialmente cierto en el caso de las infestaciones de pulgones en plantas hortícolas y florales. Sin embargo, los jardineros que quieran proteger el planeta y sus bolsillos pueden recurrir a soluciones naturales para deshacerse de estas plagas chupadoras de savia en sus plantas. He aquí 4 recetas de pulverizadores contra pulgones que harán añorar los pesticidas químicos a los aficionados a la jardinería. ¡Olvídese de los caros insecticidas perjudiciales para la biodiversidad!
1) Spray de ajo antiáfidos
El ajo tiene muchas virtudes, y aunque es apreciado sobre todo por sus beneficios para la salud humana, también lo es especialmente para el jardín. El ajo es un excelente repelente de plagas e insectos. Para mantener a raya a los pulgones, macera 100 g de dientes de ajo machacados en 4 litros de agua durante 24 horas. Al día siguiente, hierve la mezcla macerada durante 20 minutos. Así se obtiene una decocción que, una vez fría, se puede pulverizar sobre las plantas infestadas. Pero asegúrate de hacerlo un día que no llueva.
2) Cebollas, tan eficaces como su prima
Esta vez nos quedamos en la despensa con la cebolla. Pica 100 g y hiérvelos durante 30 minutos en 8 litros de agua. A continuación, deja que se enfríe y rocía la mezcla pura sobre las plantas. Asegúrate de utilizar la mezcla el mismo día que la cocines, ya que no se conservará mucho tiempo. Si, por el contrario, no has podido utilizarlo todo, como los pulgones, debes saber que la cebolla también puede utilizarse contra ciertas enfermedades temidas por los jardineros, en particular las relacionadas con los hongos.
3) Ortigas, ¡un buen repelente de pulgones!
Muy populares en el jardín, las ortigas también pueden utilizarse para preparar una mezcla para eliminar los pulgones. Para ello, ponte tus mejores guantes y recoge alrededor de 1 kg de hojas de ortiga, dando preferencia a los tallos sin flores. Después de esta larga recolección, ¡habrás hecho la mayor parte del trabajo! Sólo tienes que macerarla en 10 litros de agua durante 24 horas. El macerado obtenido puede utilizarse puro en las plantas infectadas. También puedes preparar un purín de ortiga más concentrado macerando 1 kg de hojas de ortiga en 8 litros de agua durante 2 o 3 semanas. A continuación, puede mezclar 1 dosis de este preparado con 7 dosis de agua antes de pulverizar las plantas.
4) Dientes de león
¿Y si dejáramos de pensar mal de estas malas hierbas, que sólo son malas de nombre? En realidad pueden ser muy útiles. El diente de león se utiliza mucho en la medicina tradicional, por ejemplo, pero su uso en el jardín sigue siendo el más conocido por sus propiedades antiparasitarias. Su uso es sencillo: macerar 400 g de hojas de diente de león en 10 litros de agua durante al menos 3 horas antes de pulverizar cuidadosamente bajo las hojas.
También puedes plantearte recurrir al control biológico para deshacerte de los pulgones adoptando unas colonias de mariquitas, moscas planeadoras, crisopas o mantis religiosas. Alternativamente, el clásico jabón negro o los aceites esenciales antiáfidos ¡también pueden hacer maravillas! Lo importante es actuar lo más rápidamente posible cuando note la invasión. Esto limitará los daños a sus plantas y garantizará una eliminación más eficaz de los indeseables.
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