En algunas partes del mundo, las plagas están invadiendo diferentes tipos de cultivos y esto es motivo de gran preocupación. Veamos qué está ocurriendo.
Las plagas son sin duda perjudiciales para los cultivos, pero su aumento puede deberse a que algo va mal en el medio ambiente.CUIDAR EL MEDIO AMBIENTEA menudo olvidamos lo importante que es cuidar el medio ambiente que nos rodea y que es nuestro hogar. De hecho, la Tierra es una y única y todas las acciones que hagamos hoy pueden afectar a quienes la habiten en el futuro.Sin embargo, los seres humanos se entregan a menudo (y voluntariamente) a la imprudencia, olvidando que no hay otro planeta que habitar. Lo que provoca desastres únicos.En los últimos meses, además de otras numerosas amenazas, los cultivos de campo han entrado en el punto de mira por un problema. Especialmente en EE.UU., algunos cultivos han sido atacados por numerosos insectos y plagas. Los cultivos que más han sufrido han sido los de maíz.¿Qué parásito es?La plaga en cuestión ha sido identificada por los científicos como Helicoverpa Zea. El insecto es capaz de atacar hasta más de un centenar de cultivos diferentes: berenjenas, tomates y pimientos son algunos de ellos. No se descarta que las plagas se trasladen pronto a nuevos tipos de hortalizas.Los ejemplares adultos son amantes de vivir de noche. Reaccionan a la radiación de tipo lumínico cuando está oscuro, por lo que pueden ser atrapados por trampas de luz, en particular, las que tienen luz ultravioleta. Además de la luz, se pueden utilizar feromonas de agregación o sexuales para atraparlas.Son muchas las causas de su invasión, pero todas están relacionadas con el estado del planeta Tierra. Uno de los principales problemas lo causa el calentamiento global. Al ser plagas migratorias, pueden desplazarse de una zona a otra y prefieren los lugares donde el clima es suave. El frío, de hecho, frenaría su desarrollo.Cuanto más aumenten las zonas con un clima suave debido al calentamiento global, más posibilidades tendrán las plagas de elegir más territorios que ocupar donde proliferar. Científicos de la Universidad de Carolina del Norte también han comprobado que el calor puede aumentar el hambre de estos insectos.No sólo EE.UU., otras partes del mundo también se han visto afectadas, incluso donde el clima es notoriamente mucho más frío. Se trata de Canadá, Rusia, Noruega, Finlandia e Islandia.Además, puede surgir un problema opuesto: si no ha llovido durante mucho tiempo debido a la sequía, algunos cultivos pueden desaparecer por completo, contribuyendo a la desaparición de muchos organismos fundamentales para el equilibrio de nuestro ecosistema.