El tizón del tomate es una enfermedad grave, pero puede tratarse con fumigación casera. Recuerda que es más fácil prevenir que tratar. Y nunca subestimes los primeros síntomas del tizón de la patata, porque cuanto más tarde reacciones, menos posibilidades tendrás de salvar la fruta de tu huerto.
El tizón de la patata es una peligrosa enfermedad fúngica que ataca tanto a los tomates como a las patatas. Las hortalizas corren especial peligro durante los periodos de lluvias intensas.
No espere a que el problema aparezca en su huerto, prepárese de antemano tomando medidas preventivas. Ventile regularmente los invernaderos y túneles en los que crecen los frutos y utilice un pulverizador casero contra el tizón del tomate como medida preventiva. Esto salvará la cosecha.
Tizón de la patata en los tomates: cómo reconocer los síntomas
Los síntomas más comunes del tizón del tomate son, por supuesto, manchas en hojas, brotes y frutos… Inicialmente de color gris o verde grisáceo.
Más tarde, a medida que avanza la enfermedad, cambian a color marrón o completamente negro. Su forma es irregular. Otro síntoma del tizón de la patata es el residuo blanco (micelio) que suele acompañar al cambio de color.
La lucha contra el tizón de la patata en los tomates. Más vale prevenir que curar
La mejor forma de combatir el tizón del tomate es la prevención. Al fin y al cabo, hace tiempo que se sabe que más vale prevenir que curar. Para minimizar el riesgo de problemas, se pueden plantar variedades especiales de tomatesmás resistentes al ataque de hongos (Antares y Polbig).
Al regar los tomates, no riegues las hojas, ya que la humedad favorece el desarrollo de enfermedades fúngicas. Riégalos cerca del suelo, no desde arriba, y procura ventilar con regularidad el invernadero en el que se cultivan.
Si la planta enferma, elimine inmediatamente los brotes, hojas y frutos enfermos, y retírelos inmediatamente del huerto. Esto evitará que la infección se propague a otras plántulas. No utilice tomates enfermos para hacer compost. En su lugar, mételos en una bolsa de basura sellada.
Utiliza un spray fungicida en los tomates y el problema desaparecerá.
También puedes utilizar productos ya preparados disponibles en tiendas de jardinería para controlar el tizón de la patata. Pero una mejor opción son los aerosoles caseros y naturales que puedes hacer tú mismo. Uno de los mejores es un espray de levadura para tomates, que contiene hongos beneficiosos que expulsan a los patógenos dañinos.
Para prepararlo, necesitas 100 gramos de levadura de panadería fresca. Disuélvela en 10 litros de agua, viértela en un pulverizador y rocía las plantas cada 7-8 días..