Hay un truco para limpiar la ceniza y el polvo de la chimenea en un solo paso: sólo se tardan dos minutos.

La chimenea encendida en invierno no sólo es un elemento de compañerismo y para compartir, sino también una forma de acurrucarse calentitos cuando llueve o hace frío fuera. Hoy en día se pueden encontrar tradicionales o en diseños modernos, con cristal y lo suficientemente grandes como para cubrir toda la superficie de la casa.
Elijas la forma que elijas, una o dos veces al día es obligatorio hacer una limpieza a fondo y retirar la ceniza y el polvo de la chimenea. Gracias a los expertos en limpieza, existe un truco para hacerlo rápidamente..
¿Cómo eliminar la ceniza y el polvo de la chimenea? El método de los expertos
Es importante, cada día, que la chimenea se limpie externa e internamente. No es sólo una cuestión de higiene, sino también de funcionalidad adecuada a lo largo del tiempo lo que le permitirá ahorrar en los materiales utilizados y también en el trabajo extra de un técnico especializado.

Lo primero que hay que hacer es adoptar un método rápido y sencillo, como sugieren los expertos en limpieza. Antes de encender la chimenea, coloque una hoja de papel de aluminio en su interior para que la ceniza caiga y se acumule sobre ella. Una vez que la chimenea esté apagada y la ceniza fría, podrá retirarla retirando el papel de aluminio enrollándolo..
No sólo eso, una bola de papel de aluminio también es útil para deshacerse de la ceniza y el polvo que se han acumulado durante el uso. Frota bien la bola por dentro y por fuera antes de proceder con los demás pasos..

A continuación, procedemos con un aspirador de cenizas para eliminar cualquier residuo que aún quede en el interior.
Ingredientes naturales para la limpieza de chimeneas
Una vez retirado todo el polvo y las cenizas, se procede a la limpieza propiamente dicha. Para ello, no se utilizan productos que puedan contener ingredientes químicos y contaminantes, sino ingredientes naturales de uso común y siempre presentes en el hogar.
Coge un barreño lleno de agua tibia con una cucharada de bicarbonato de sodio. Remueve hasta que se disuelva y, a continuación, utiliza un cepillo duro para fregar las paredes interiores de la chimenea. Aclara bien y seca con la ayuda de un paño de microfibra.
Si la chimenea tiene cristal, éste debe limpiarse con vinagre de vino blanco untado en una esponja húmeda. Inmediatamente después poner otra capa de producto y luego aclarar bien, secando el cristal completamente.

¿Se puede reutilizar la ceniza de la chimenea? Los expertos siempre recomiendan reciclar todo aquello que pueda tener una segunda vida. La ceniza es ideal para limpiar sartenes incrustadas, parrillas de barbacoa empapadas de grasa y como abono para las plantas.