Si quieres insuflar nueva vida a tu huerto, entierra cebollas dentro de un vaso con tierra. Esto es lo que ocurre.
Cebollas, uno de los ingredientes básicos de las recetas favoritas de los italianos. Cultivarlas en casa, sin embargo, parece para muchos un reto inalcanzable, sobre todo porque muchas personas no disponen del espacio para hacerlo. La buena noticia es que existe un truco que permite cultivar cebollas directamente en casa, incluso en espacios diminutos, como un vaso de plástico.
LOS BENEFICIOS OCULTOS DE LA CEBOLLA
Las cebollas cebollas son una verdura realmente popular en Italia, donde las encontramos en diferentes variedades: rojas, blancas, doradas y así sucesivamente. Además de ser versátiles y sabrosas, sin embargo, las cebollas también cuentan con especiales beneficios para nuestra salud.
Las cebollas crudas, son hipocalóricas y contienen micronutrientes esenciales como vitaminas B, fósforo y potasio. Además, contienen una buena cantidad de fibras, entre ellas frucanos, beneficiosos para la salud del sistema gastrointestinal. Pero eso no es todo: las cebollas son ricas en vitamina C, esencial para la síntesis de elementos como hormonas y proteínas, así como para la salud del sistema inmunitario.
Además de estos elementos que hemos enumerado brevemente, las cebollas son alimentos ricos en ácido fólico, fósforo, calcio, vitamina B6 y potasio. Esto hace que actúen de forma beneficiosa en varias áreas de nuestro organismo. Por ejemplo, tienen una acción antimicrobiana que permite combatir mejor las infecciones bacterianas Escherichia coli, Staphylococcus aureus y Helicobacter pylori..
Además, las cebollas pueden reducir los niveles de azúcar en sangre, con efectos beneficiosos sobre la glucemia. De hecho, un estudio de 2010 demostró que consumir 100 gramos de cebollas rojas crudas cada día puede mejorar los niveles de glucemia en pacientes con diabetes. ¡Una auténtica toccasana para la salud!
Cómo enterrar cebollas en un vaso de plástico
Cómo es posible que plantas de cebolla crezcan dentro de vasos de plástico? Hay varios vídeos en YouTube en los que expertos botánicos ilustran este truco. El procedimiento a seguir es rápido y sencillo, y permite empezar a ver resultados ya después de los primeros 7 días de cultivo..
En cuanto a los materiales, necesitaremos un vaso de plástico transparente, o en su defecto un jarro. Además, necesitaremos un cúter o un destornillador, unas sojas, cebollas y un cuchillo.
Para empezar, cortamos las cebollas en plano, eliminando los carbones pero no las raíces, que en cambio serán fundamentales para lo que vamos a hacer. A continuación, hacemos pequeños agujeros en el fondo y los laterales de las macetas y los rellenamos con tierra para macetas. Al hacerlo, sin embargo, dejamos un poco de espacio entre la tierra para macetas y el borde de la maceta, aproximadamente un par de centímetros.
Una vez hecho esto, damos forma a la superficie de la tierra con los dedos para crear un pequeño hueco en el centro, en el que colocaremos una cebolla. En cuanto a la posición de la cebolla, recuerda que debe colocarse con las raíces hacia abajo. Por último, coloca las macetas en recipientes o platillos, y riega aproximadamente cada dos días.
A medida que sigamos regando, notaremos que las primeras hojas verdes brotan al cabo de unos 7 días, ¡una buena señal para el crecimiento de nuestras plantas de cebolla!